El comercio internacional enfrenta desafíos constantes en el transporte de mercancías, especialmente cuando se trata de cargas delicadas y de gran peso. Factores como el embalaje, la sujeción de la carga y la supervisión en el origen son fundamentales para garantizar la entrega en óptimas condiciones, pues un descuido en estos procesos puede generar pérdidas económicas, retrasos en la cadena de suministro y afectar así la reputación de las empresas.
Para entender un poco más el alcance de este tema, le compartimos desde Seguros Bolívar este caso de estudio que le permitirá conocer los riesgos y las mejores prácticas para minimizar incidentes en el transporte de mercancías.
Una empresa colombiana especializada en la comercialización de productos metálicos enfrentó una crisis logística cuando recibió un lote de 300 bobinas de acero galvanizado con daños significativos en el puerto. La mercancía, proveniente de Shanghái, China, llegó con abolladuras visibles que comprometían su calidad, generando un conflicto con el cliente final.
El envío se realizó bajo la modalidad marítima y bajo el Incoterm CFR (Costo y Flete). Esto implicaba que esta empresa, se encargaba de los costos y contrato del transporte desde el puerto donde llegaría la mercancía, pero el riesgo de la mercancía lo asumía una vez que las bobinas fueran entregadas al transportista en el puerto de origen en Shanghái, China. Finalmente cuando el buque llegó al puerto en Colombia, se evidenció durante la inspección previa al descargue en puerto, averías particulares en la carga.
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Causas del daño en la carga marítima
Tras una investigación detallada, se identificaron varias fallas clave que llevaron a los daños en la mercancía:
- Deficiente embalaje en origen: aunque las bobinas fueron aseguradas sobre estibas, el material de protección no fue suficiente para soportar las condiciones del transporte marítimo. La falta de un refuerzo adecuado permitió que las bobinas fueran susceptibles a golpes y deformaciones.
- Falla en la sujeción y trincaje: la mercancía no se transportó en contenedores, sino como carga suelta, lo que aumentaba la necesidad de una fijación segura. Se evidenció que algunas bobinas llegaron desalineadas, con correas metálicas sueltas y sin la separación adecuada respecto a otras cargas. Este descuido en la estiba permitió que las bobinas se movieran durante el trayecto, causando impactos entre ellas y con las estructuras del buque.
- Manejo inadecuado en la estiba: parte de las bobinas fueron estibadas con vigas en la parte superior, lo que pudo haber agravado los daños. Además, la inspección en destino reveló que la sujeción de la carga no cumplía con los estándares recomendados, lo que facilitó el desplazamiento y posibles golpes durante la navegación.
El impacto para la empresa
El impacto del incidente fue significativo, generando consecuencias en distintos frentes:
- Problemas con el cliente: La mercancía dañada no cumplía con los estándares de calidad esperados, lo que llevó al rechazo parcial del lote. El cliente exigió el reemplazo de las bobinas afectadas, lo que generó retrasos en la entrega y afectó la relación comercial.
- Retrasos en la cadena de suministro: La necesidad de inspeccionar las bobinas, gestionar su reposición y coordinar un nuevo envío comprometió los plazos de entrega. Como resultado, el cliente no pudo continuar con su producción de manera inmediata, lo que impactó sus propios compromisos comerciales.
- Costos adicionales: La empresa tuvo que asumir gastos extra en inspecciones, transporte de las bobinas dañadas a un almacén para su reparación o sustitución, y otros costos logísticos derivados del incidente.
Lecciones aprendidas y recomendaciones en este caso de transporte marítimo
Para evitar incidentes similares en el futuro, es fundamental implementar estrategias que fortalezcan la seguridad y eficiencia en la logística marítima. En Seguros Bolívar le compartimos algunas recomendaciones:
- Supervisión del embalaje en origen: garantizar que el proveedor cumpla con estándares de protección adecuados para cargas pesadas y frágiles. Incorporar materiales de refuerzo que minimicen el impacto de golpes y movimientos.
- Inspección previa al embarque: implementar controles de calidad en origen para verificar que la mercancía esté correctamente asegurada antes de zarpar. Esto puede incluir revisiones visuales y pruebas de resistencia.
- Optimización del trincaje y sujeción: asegurar que la carga suelta sea fijada correctamente dentro del buque mediante técnicas de sujeción certificadas. Es recomendable el uso de dispositivos como almohadillas de aire o materiales de amortiguación que reduzcan los impactos.
- Uso de tecnologías de monitoreo: incorporar sensores de impacto y vibración que permitan detectar irregularidades en tiempo real durante el transporte marítimo. Esto puede proporcionar alertas tempranas sobre posibles problemas.
- Capacitación en gestión logística: instruir a operadores portuarios y transportistas sobre las mejores prácticas de embalaje y sujeción para minimizar riesgos. La capacitación en estándares internacionales de estiba puede ser clave para reducir incidentes.
Este es un ejemplo de cómo la falta de supervisión en la cadena logística puede generar costos elevados y afectar la relación con los clientes. A pesar del impacto inicial, la empresa logró mitigar los daños mediante la activación de su seguro y la implementación de mejoras en sus procesos.
Este incidente subraya la importancia de una planificación estratégica, un control riguroso en el origen y la aplicación de mejores prácticas en el transporte marítimo. Prevenir problemas logísticos no solo protege la mercancía, sino que también refuerza la confianza de los clientes y mantiene la estabilidad de la cadena de suministro.
Si necesita ampliar la información sobre cómo controlar y mitigar los riesgos en los procesos de distribución de sus productos o mercancía, le invitamos a conocer el Programa Global de Logística – PGL de Seguros Bolívar. Recuerde que cuando se trata de brindarle tranquilidad y cuidar su negocio, en Seguros Bolívar pensamos en usted.
*Caso de estudio basado en una historia real de un cliente.
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