Neuralgia: qué es, causas, tipos, síntomas y tratamiento

¿Alguna vez ha sentido un dolor intenso y repentino en la cara, el cuello o alguna parte del cuerpo sin una causa aparente? Podría tratarse de una neuralgia, también conocida como dolor neuropático o neuropatía dolorosa.

Este tipo de dolor se presenta cuando un nervio resulta irritado o dañado. Aunque no se considera una enfermedad en sí misma, sí es un síntoma importante que puede indicar la presencia de otro problema de salud.

Según el portal médico Better Health Channel, las personas mayores son más propensas a presentar este tipo de dolor, aunque puede manifestarse a cualquier edad. En la mayoría de los casos, los episodios leves desaparecen por sí solos, pero cuando el malestar es persistente, es fundamental buscar atención médica.

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¿Qué causa la neuralgia?

De acuerdo con MedLinePlus, las causas de la neuralgia pueden ser muy variadas. En algunos casos, no se logra identificar un origen exacto; en otros, puede estar relacionada con:

• Enfermedades como la diabetes, insuficiencia renal crónica o infecciones como el herpes zóster (culebrilla), VIH/SIDA, enfermedad de Lyme o sífilis.
• Efectos secundarios de ciertos medicamentos, entre ellos el cisplatino, paclitaxel o vincristina.
• Presión sobre los nervios debido a ligamentos, vasos sanguíneos, tumores o lesiones previas.
• Traumas físicos o quirúrgicos.

En general, la neuralgia aparece cuando los nervios transmiten señales de dolor sin que exista una causa física evidente, lo que genera una sensación intensa y persistente.

Tipos de neuralgia

Existen varios tipos de neuralgia, y algunos pueden afectar significativamente la calidad de vida si no se tratan de forma adecuada. A continuación, le contamos los más frecuentes:

1. Neuralgia postherpética

Es una complicación del herpes zóster (culebrilla). El dolor puede presentarse en cualquier zona donde haya aparecido el brote y puede durar meses o incluso años.
En algunos casos, el malestar aparece antes de que surjan las lesiones visibles en la piel. El dolor sigue el trayecto de un nervio y generalmente afecta un solo lado del cuerpo.

2. Neuralgia del glosofaríngeo

Según el portal Healthline, este tipo de neuralgia es poco común, pero se caracteriza por causar dolor intenso en la garganta, el cuello o la parte posterior de la lengua. Suele desencadenarse al tragar o hablar.

3. Neuralgia del trigémino

Es una de las formas más conocidas y dolorosas. De acuerdo con el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS), produce un dolor facial agudo, punzante y repentino, similar a una descarga eléctrica, que puede durar desde unos segundos hasta un par de minutos.

Generalmente afecta un solo lado del rostro, especialmente la mandíbula, los dientes o las encías. En casos muy poco frecuentes, el dolor puede aparecer en ambos lados, aunque no al mismo tiempo.

Síntomas del dolor neuropático

Identificar si el dolor que siente corresponde a una neuralgia puede ser difícil, ya que sus síntomas pueden confundirse con los de otras afecciones. Según el portal médico Very Well Health, los signos más comunes son:

• Aumento de la sensibilidad: la piel a lo largo del nervio afectado se vuelve extremadamente sensible; incluso un toque leve puede causar dolor.
• Dolor agudo o punzante: el malestar puede ser constante o aparecer de manera intermitente, con sensación de ardor o calambre.
• Debilidad muscular: en algunos casos, los músculos controlados por el nervio afectado pueden debilitarse o perder movilidad.
• Dolor que empeora con el movimiento: realizar actividades cotidianas puede intensificar el dolor.

Si estos síntomas se mantienen por varios días o interfieren con sus actividades diarias, lo mejor es acudir a un especialista en neurología.

Tratamiento de la neuralgia

La buena noticia es que sí existen tratamientos para aliviar el dolor y mejorar la calidad de vida. El primer paso es identificar y tratar la causa que origina la neuralgia.

Entre las opciones más comunes están:

• Medicamentos analgésicos y antiinflamatorios, que ayudan a reducir el dolor.
• Terapias complementarias como la acupuntura, el yoga o la fisioterapia, que contribuyen a relajar los músculos y mejorar la circulación.
• Ejercicio moderado y técnicas de respiración o relajación, que fortalecen el cuerpo y disminuyen la tensión nerviosa.
• Suplementos nutricionales, especialmente aquellos que corrigen deficiencias de vitamina B12, la cual tiene un papel importante en la salud de los nervios.

En algunos casos, el tratamiento puede incluir medicamentos específicos para el dolor neuropático o, en situaciones más complejas, procedimientos quirúrgicos para liberar la presión sobre los nervios.

Cada caso es único, por eso es fundamental contar con la valoración de un médico especialista.

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Consejos para cuidar sus nervios y prevenir el dolor neuropático

Aunque no siempre se puede prevenir una neuralgia, mantener hábitos saludables puede reducir el riesgo de padecerla o aliviar sus síntomas:

1. Mantenga un estilo de vida activo. Realizar actividad física de forma regular mejora la circulación y fortalece el sistema nervioso.
2. Adopte una alimentación balanceada. Incluir frutas, verduras y proteínas magras ayuda a nutrir los tejidos nerviosos.
3. Controle los niveles de azúcar en sangre. Si padece diabetes, seguir el tratamiento médico y una dieta adecuada es clave para evitar daño en los nervios.
4. Evite el consumo excesivo de alcohol y tabaco. Ambos pueden afectar la función nerviosa y disminuir la capacidad de recuperación.
5. Descanse lo suficiente. Un sueño reparador contribuye al equilibrio físico y mental.
6. Gestione el estrés. Practicar respiración consciente, meditación o actividades relajantes puede reducir la tensión y prevenir recaídas.

El bienestar empieza por cuidar su salud

Si sospecha que puede estar experimentando una neuralgia o siente dolor persistente, no lo deje pasar. Un diagnóstico oportuno puede marcar la diferencia entre una molestia temporal y una condición crónica.

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